viernes, 11 de noviembre de 2011

Liderazgo

Se habla mucho estos días de liderazgo. Hay quien cree que ser lider es ser mejor que el resto, y hay otros que entienden que ser lider es convertirse en la referencia de algo o de alguien en cualquier aspecto de la vida. Yo creo que los líderes son aquellos que con su trayectoria de vida personal y profesional se han ganado el respeto de la comunidad donde viven o trabajan. El liderazgo es una cualidad humana que mal llevada se asemeja mucho a la gilipollez, con perdón, y es ahí donde muchos se están quedando a la hora de hablar de liderazgo. Yo a veces me pregunto para qué queremos líderes en la sociedad que vivimos, si al final no son capaces de transformar su entorno en algo mejor. Yo quiero líderes con sentido común, con humanidad y formado en valores humanos de los que estamos tan necesitados hoy día.
En los tiempos que nos ha tocado vivir hay que repensar eso del liderazgo, porque hay mucho gili que con un falso liderazgo acaba liando la de Dios Padre. Y no me refiero sólo a Gadafi o Mubara, que vaya tela con ambos, sino aquellos que son tan mediocres que entienden la vida solo si miran a los demás por encima del hombro. Y encima se dicen líderes. Y no son ni líderes, ni visionarios, son unos gilipollas que nos acaban costando el tiempo y el dinero. Lo primero muy valioso, porque el tiempo es lo que más vale en esta vida, y el dinero lo que menos, aunque algunos líderes piensen que es para lo único que tienen visión. Maldito parné que diría la copla.

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